Valió la pena haber creado un blog de la nada y darle forma.
Valió la pena escribir sobre cosas que vivía, dar a conocer muchas cosas y compartir criticas sin siquiera saber que los posts llegarían a ser leídos por alguna persona.
Valió la pena seguir escribiendo cuando te preguntaban porqué lo hacías sin siquiera saber qué responder, sino simplemente haberlo hecho porque te gustaba.
Valió la pena trabajar durante años y que el esfuerzo llegue más allá y sea reconocido, pero más allá de que sea reconocido, lo importante: ganarse un lugar.
Recorrimos distintos pasajes, distintas épocas, rememorando íconos basándonos en inspiraciones, nos hicimos eco de distintos eventos, lanzamientos, desfiles.
Una hermosa etapa culmina pero a la vez otra se inicia, una nueva etapa laboral donde el factor "tiempo para redactar en un blog" se reduce.
Gracias por compartir, por leernos, por estar ahí siempre!
Hoy día puedo decirles que siento una gran satisfacción, una meta lograda y muchas otras que quedan en el tintero por cumplir.
A luchar por los sueños, que aunque parezcan imposibles; si uno trabaja por ellos se hacen realidad.
¡Hasta pronto!
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